En 1921 Le Corbusier publicó un artículo en el que exponía un concepto totalmente nuevo de vivienda. Para guardar concordancia con su tiempo, la casa debía ser una "máquina para vivir" y homologarse al resto de bienes que configuran la sociedad tecnológica. Con ello no defendía la estética ni el espíritu maquinista, sino que trataba de hacer una casa tan eficaz funcionalmente como lo eran las máquinas en las tareas para las que habían sido inventadas.
La vida moderna traía consigo una serie de exigencias cuya satisfacción era imposible encontrar en la pervivencia de la arquitectura tradicional; había por ello que adecuar la arquitectura a la civilización surgida de la revolución industrial:
"...Nosotros gustamos del aire puro y del sol a raudales... -afirmó-. La casa es una máquina de vivir, baños, sol, agua caliente y fría, temperatura regulable a voluntad, conservación de los alimentos, higiene, belleza a través de proporciones convenientes. Un sillón es una máquina de sentarse... los lavabos son máquinas para lavar... El mundo de nuestro quehacer ha creado sus cosas: la ropa, la estilográfica, la cuchilla de afeitar, la máquina de escribir, el teléfono... la limusina, el barco de vapor y el avión."
Así, pues, era absolutamente necesario crear también una nueva arquitectura, y Le Corbusier la fundó en torno a cinco puntos básicos:
utilización de pilotis (elementos de sustentación), jardines en el tejado, libre conformación de las plantas, ventanales continuos y libre formación de la fachada, todo ello dentro de un estricto orden geométrico como único generador de "volúmenes puros". Estas soluciones pasarían a ser las características fundamentales y paradigmáticas del racionalismo arquitectónico.
La utopía de Le Corbusier fue crear una nueva realidad urbana, una ciudad que fuera una síntesis entre naturaleza y desarrollo tecnológico.
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Hoy me he colado en la fábrica de Ford de Valencia, en Almussafes, para enseñaros todos los procesos de fabricación en serie de los automóviles. LA FÁBRICA PARECE EL VIDEOJUEGO DEL PORTAL 2, así te lo digo. Está llena de robots increíbles que hacen unas coreografías preciosas para cortar, dar forma, soldar, montar, etc todas las piezas de un coche. La industria del coche (y Ford en particular) estuvo a la cabeza de los procesos de estandarización del siglo XX, e influyó muchísimo en la Arquitectura!!!! que hasta entonces estaba dormida en los laureles: las casas que se hacían todavía eran MUY poco prácticas (con ventanas de distintos tamaños, muros innecesariamente gruesos, tejados INNECESARIAMENTE inclinados, en fin. Un overkill brutal.)
En su libro "Hacia una Arquitectura", Le Corbusier planteaba todas sus preocupaciones acerca de LA DESGANA con la que se construían las casas, y proponía inspirarse en la industria del automóvil para hacer diseños estandarizados y modulares. Él entiende la casa como "la máquina de habitar" y diseña la Maison Dom-Ino, que pretende construir en serie, con ventanas y puertas estandarizadas, muebles modulares, etc. O sea LO QUE A TI TE PARECE LO NORMAL??? pues eso. PERO ES QUE EN ESA ÉPOCA NO ERA NORMAL!!!!
La revolución que vivió la arquitectura en el siglo XX fue MINDDDBLOWINGGGG. Este vídeo está hecho en colaboración con Ford.
Cuando una estructura trabaja a tracción, si le das la vuelta es exactamente igual de estable, pero trabaja a compresión. En este principio se han basado arquitectos como Frei Otto para la construcción de cubiertas, e ingenieros como Mike Schlaich para diseñar un puente más fino que la cáscara de un huevo. Y todo eso ayudándose de una red de naranjas...
Web de Schlaich-Bergermann Partners:
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Los increíbles ARCOS de Gaudí:
¿Por qué tienen formas TAN RARAS?
